¿Qué es el trash cooking? Aprende cómo ahorrar en tus recetas

El trash cooking es lo que en español denominamos cocina de aprovechamiento, es decir, sacarle el mayor partido a los productos creando nuevas elaboraciones con las sobras de un plato o con partes de ingredientes que normalmente terminarían en la basura. De ahí, el término “trash” ("basura"), en inglés. La cocina de aprovechamiento no solo ofrece ventajas para tu bolsillo, sino también para el medioambiente. ¿Quieres un par de consejos e ideas de recetas para hacer un consumo más responsable de los alimentos? Te explicamos detalladamente cómo beneficiarte de esta tendencia.

Cocina de aprovechamiento: ventajas

En épocas de escasez, tirar comida a la basura era simplemente impensable. Se improvisaban recetas con sobras e ingredientes que estaban a punto de estropearse. Lamentablemente, a día de hoy el desperdicio de alimentos aumenta cada vez más e, irónicamente, no hace mucho tiempo atrás la cocina de aprovechamiento venía dada por la escasez de recursos. Nuestras abuelas hacían auténticos malabares para evitar el desperdicio de comida. Gracias a ellas, tenemos algunos de los platos más ricos de la gastronomía española como croquetas, empanadillas o torrijas. 

Actualmente, la cocina de aprovechamiento se ve más asociada a la conservación del medioambiente. El reciclaje, el consumo de productos locales o la reducción de las emisiones de carbono son algunas de las medidas que han cobrado más relevancia en los últimos años. No obstante, tanto hogares como empresas olvidan que algunos gestos tan sencillos como reutilizar los alimentos pueden causar un gran impacto global e individualmente.

Te resumimos algunas de las ventajas de la cocina de aprovechamiento: 

Una de las ventajas directas es el ahorro de dinero, puesto que al sacar más provecho de los alimentos tu lista de la compra se ve afectada cada semana un poquito más. 

Otra ventaja es el ahorro de tiempo, porque el principio de la cocina de aprovechamiento es crear nuevas receta a partir de alimentos que ya están cocinados, por lo que podemos cocinar una vez para varios días. Otra opción es dejar preparados muchos platos como sucede con el batch cooking.

¡Claro que sí! El simple hecho de tener que responder a la pregunto "¿qué puedo cocinar con los restos de...?" acitivará un proceso creativo que solo puede ir en aumento. Desde Just Spices, como siempre, queremos ponértelo fácil. Por eso, en este artículo encontrarás algunas ideas como, por ejemplo, recetas de calabacín. 

Y, por último, no podemos olvidar una de las ventajas más importantes: la contribucións al medioambiente y a la responsabilidad social. Es el compromiso de todo el mundo hacer un consumo responsable de alimentos y evitar ostentación en un mundo donde, desgraciadamente, todavía sigue habiendo un número alto de personas con recursos escasos. 

¿Qué debo tener en cuenta para comenzar la cocina de aprovechamiento?

Lo ideal sería reducir al máximo las sobras de comida. Ese tupper olvidado al fondo del frigorífico no debería haber estado ahí nunca. Si necesitas ayuda para calcular la cantidad de los alimentos, échale un vistazo a nuestra categoría “aprender a cocinar” donde te daremos trucos para saber, por ejemplo, la cantidad de arroz por persona.

Esto prolongará la conservación de los alimentos y, por tanto, se reducirá la cantidad de desperdicios.

Así, podrás reutilizar cada comida de distintas formas.

¿Qué cocinar con las pieles de...?

Recetas con las pieles de patatas

Un clásico es reutilizar las pieles de este tubérculo para hacer unas patatas fritas casaras. El procedimiento es el mismo, puedes freírlas, prepararlas en el horno o en la freidora de aire, lo único que tienes que tener en cuenta es que al tratarse de pieles y, por tanto, ser más finas, tardarán menos en hacerse.

Recetas con las pieles de verduras

Aquí sucede un poco igual, lo típico y más fácil es preparar unas chips de verduras. Para ello, te puedes basar en esta receta de chips de remolacha, eso sí, no con la piel de esta verdura. Las mejores verduras para ello son los calabacines, zanahorias y berenjenas. De hecho, con las pieles de zanahoria puedes preparar un bizcocho de zanahoria.  

Hay que tener en cuenta que las pieles pueden amargar un poco, por eso hay que lavarlas bien e, incluso, remojarlas en leche. También puedes guardarlas en una bolsita hermética en el congelador para usarlas cuando quieras. Otra opción es preparar estas mini quiches de verduras o, sencillamente, una crema, como esta crema de puerros y patatas. 

Recetas con las pieles de la cebolla

¿Lo sabías? Como suelen decir las madres, "en esta casa no se tira nada" y las pieles de las cebollas también cuentan. Las pieles de las cebollas pueden usarse para caldos y asados, otorgando un color y sabor más intenso. Eso sí, hay que lavar para quitar impurezas y colar el caldo o salsa. Otra forma de reutilizar las cáscaras de las cebollas es creando tu propio sazonador. Para ello debes secar las pieles y triturarlas hasta que te quede un polvo que puedes echar al pan rallado para un toque extra de sabor. 

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¿Qué cocinar con las sobras de...?

Recetas con las sobras de verduras

Si te sobran verduras, puedes preparar esta increíble crema de verduras asadas o un pisto de verduras. Aquí de nuevo, es buena idea la receta de una quiche de verduras o esta frittata de verduras con feta. 

Recetas con las sobras del cocido

Cuando preparamos cocido, solemos preparar algún tupper de más para tener la comida lista al dá siguiente. Esto está muy bien, pero ¿qué pasa si tienes demasiada carne? Unas croquetas de jamón, unos canelones o la ropavieja son opciones perfectas. Los huesos de carne son ideales para preparar más sopas y caldos. Con los garbanzos, puedes preparar un hummus con un toque de puchero. Buena idea, ¿no te parece?

Recetas con las sobras de pescado

Son muchas las opciones que tenemos para aprovechar las sobras del pescado. Con la cabeza y las espinas, podrás crear de cero un caldo para una deliciosa sopa de pescado o para un fumet que puedes usar para esta increíble zarzuela de pescado y marisco.

Recetas con las sobras de pollo

Aquí de nuevo se tienen que mencionar unas buenas croquetas de pollo. Este producto es muy versátil y muy agradecido. Con las carcasas del pollo se puede preparar un caldo para un arroz con pollo, por ejemplo.

Más ideas para reutilizar alimentos

Recetas con fruta muy madura

La fruta madura suele tener un sabor más dulce y su consistencia es mucho más blanda. Por eso, te recomendamos que elabores mermeladas, compotas o bizcochos como este bizcocho de plátano. También puedes preparar deliciosas manzanas asadas o congelarla en dados para hacer batidos de frutas, smoothie bowls o helados.

Recetas con pan duro

El pan no suele durar más de un día en perfecto estado. Cuando se quede duro, puedes preparar unas torrijas o unas migas extremeñas. También puedes triturarlo y hacer pan rallado para unas croquetas o un filete empanado.

Reutilizar el aceite de oliva de las latas de atún 

¿Qué te parece si elaboras un marinado mezclándolo con el Sazonador para Pescado? Seguramente no se te había ocurrido nunca, ¡pero está buenísimo!

Aprovechar el aquafaba

¿No sabes lo que es? El aquafaba o acuafaba es el líquido viscoso que se forma en las conservas de legumbres cocidas, como los garbanzos. Se puede usar como si fuera huevo. Prueba a preparar un merengue o una mousse de chocolate con este producto. ¡Te sorprenderá!

Como habrás podido comprobar, muchos de estos alimentos pueden reutilizarse simplemente variando su forma de cocinado. Además, utilizando las especias adecuadas puedes darle una segunda vida a los restos y sobras de comida. ¡Disfrutarás de un sabor distinto con los mismos ingredientes!